Sociedades Anónimas

 

Una sociedad anónima es una entidad de negocios constituida legalmente. El estado confiere las escrituras constitutivas, un documento que otorga a un negocio el permiso legal para formar una sociedad anónima. Ni la compañía de propietario único ni las sociedades de otro tipo requieren de escrituras constitutivas, ya que, a los ojos de la ley, el negocio es lo mismo que los propietarios.

Desde el punto de vista legal, una sociedad anónima es una entidad jurídica separada completamente de sus propietarios, quienes son llamados accionistas.

Accionista: Persona propietaria de acciones de una compañía.

La sociedad anónima tiene muchos de los derechos de una persona física. Por ejemplo, una sociedad anónima puede comprar, poseer y vender propiedades.

El capital social de una sociedad anónima está dividido en acciones. La mayoría de las sociedades anónimas tiene vida continua independientemente de que cambien los propietarios de las acciones.

Los accionistas de cualquier sociedad anónima pueden vender o negociar sus acciones con otras personas, cederlas o heredarlas en un testamento.

La transferencia de las acciones no afecta la continuidad de la sociedad anónima. En contraste, las compañías de propietario único y las sociedades de otro tipo dejan de serlo cuando cambia su posesión.

Representación mutua significa que todos los propietarios actúan como agentes de la compañía. Un contrato firmado por un propietario obliga a toda la compañía. La representación mutua funciona para algunas sociedades pero no para las sociedades anónimas.

Los accionistas tienen responsabilidad limitada con respecto a las deudas de la sociedad anónima. Eso significa que no tienen obligación personal con los pasivos de la sociedad anónima. Lo más que puede llegar a perder un accionista al invertir en la sociedad anónima es la cantidad invertida. En contraste, los propietarios únicos y los socios de otro tipo de sociedades son responsables personalmente de todas las deudas de sus empresas.

Responsabilidad Limitada. La ausencia de obligaciones personales de los accionistas por las deudas de una compañía.

Un accionista no puede perder más que el costo de su inversión en los valores accionarios de la compañía.

Los accionistas son dueños de la compañía, pero un consejo de administración, elegido por los accionistas, designa a los funcionarios para dirigir la compañía.

Las sociedades anónimas son entidades gravables separadas. Pagan diversos tipos de impuestos que no son aplicables para las compañías de propietario único ni para las sociedades de otro tipo, incluyendo un impuesto anual por la concesión, gravado por el estado.

Métodos para el registro contable de las inversiones en acciones:

1.    Método de costo o base legal:

Este método se utiliza cuando se adquiere o se posee hasta el 20% de las acciones de una empresa, se realizan registros contables únicamente cuando se compra, se vende y se reciben dividendos.

2.    Método patrimonial, participativo o base económica

Se utilizan cuando se compra o se posee más del 20% y menos del 50% de las acciones de una empresa, y contablemente se registran todas las modificaciones: compra, venta, ganancias, perdida, declaratoria y pago de dividendos. 

3.    Método de consolidación:

Se utiliza cuando se adquiere o se posee más del 50% de las acciones de una compañía, y aquí lo que se utilizan son estados financieros consolidados, siempre y cuando la naturaleza de las empresas sean iguales o parecidas.